CRONICAS DE LA CALLE - VERANO
Crónicas de la calle - Verano
-¡Qué calore Chiqui! ¡Me paréceno que me derrito en cualquiera momento!
-Sí, Don Negrone, tiene razón... parece que sale humito del asfalto
-Me quémano la patita estare en la calle, vamo' al pasto abaco del árbole enfrente de la casa de la Patrona
-Por lo menos alla tenemos agua para tomar ¡AAAAAAAGH! ¡Está caliente!
-E claro, si estuvo al sole tutto el día. Décalo para cuando tengas mucha sed. E' un recurso extremo, non e' para refrescarse. Venite a la sombra, al pastito.
-Acá está un poco mejor...
El auto de la seguridad se para en la esquina, a la sombra de un àrbol. El conductor se baja y lo mira con ojo crítico. Está sucio, definitivamente.
-Chiqui, ¿qué hace el señore de la caja con ruedas?
-No sé, Don Negrone. Los humanos son raros... La caja lo escupió y ahora la mira de arriba abajo... Y se fue a la casa de la vecina... ¿Qué va a hacer?
-La veritá, Chiqui... con questo calore non me importa.
-¡Negro! ¡Chiqui! ¡Vengan a tomar agua fresca!
-¿Qué dice, Don Negrone?
-Io non entiendo molto cuando hablano li humani. Vaya uno a sabere... comida non tiene.
-No, pero nos llama... ¿Vamos?
-Uf... no sé... questo calore... De aquí non lo veo bene, a lo mecore tiene uno hueso per nosotro... Bueno, vamo.
-Vengan, perritos, tengo agüita fresca para ustedes.
-Non huelo comida, Chiqui
-No, pero siempre es bueno con nosotros.
Los perros se acercan de a poco al auto, adormilados por el calor cruzan la calle lentamente y ven, por fin, lo que se esconde detrás.
-¡TIENE UNO BALDE LLENO DE AGUA! ¡Corramo' Chiqui!
-¡Vamos para la otra esquina Don Negrone!
-¡Eh, perros! ¿Qué les pasa? ¡Parece que vieron al diablo, jajaja! Bueno, si no quieren agua, lavo el coche.
-Uf, escapamos por poco, Don Negrone
-Si Chiqui, questo humani sono maniático del agua... Io sono alérgico de la boca para afuera. ¡Meno male que no' dimo' cuenta e pudimo escapare a tiempo, sino terminàbamo tutto bañado!
El equipo de investigación de "Tarde con Pinina" ha comprobado que Don Negrone y Chiquita de la Calle no son los únicos perros que odian bañarse
ENTRADA SIGUIENTE: Anotaciones del diario privado de Pili
ENTRADA ANTERIOR: Diaguio de la Guesistans - Dia 62